Es necesario y trascendental escuchar la voz de las mujeres

El año 1931, las organizaciones feministas alzaron la voz y presionaron para lograr la obtención del sufragio municipal femenino en Chile, esto fue promulgado en 1934 y se entendió como el primer paso en la entrega gradual de derechos cívicos de las mujeres. 

Las mujeres en nuestro país votaron por primera vez en la elección municipal de 1935; en esta elección se presentaron 98 mujeres de candidatas resultando elegidas sólo 25. Desde entonces sucedieron una serie de proyectos en el Congreso Nacional que proponían la plena ciudadanía política de las mujeres chilenas. Si bien desde un punto de vista histórico, la participación política fue liderada por hombres, actualmente esta situación se ha ido revirtiendo, y las mujeres cada vez vamos ganando más espacios que van desde los concejos municipales hasta la Presidencia de la República, y hemos sido promotoras de relevantes cambios y reformas en materia de justicia, laboral, educación, protección social, economía, defensa, ciencia y arte, entre otras; contribuyendo activamente al desarrollo de un mejor país.

Desde un punto de vista normativo, con la Ley 20.840 se puso fin al sistema electoral binominal por uno proporcional, y se instauró cuotas para fortalecer la representatividad en el Congreso Nacional, promoviendo la participación de mujeres en las elecciones parlamentarias, lo cual ha generado un mayor equilibrio en temática de género en la conformación de las listas de candidatos y candidatas estableciéndose que ningún sexo puede estar representado por sobre un 60%. Especial importancia tiene en esta temática, la aprobación de la paridad en la Convención Constitucional, si gana esa alternativa en el plebiscito del 25 de octubre próximo.

El llamado que hacemos como Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género es a todas las Mujeres de la Región para que este 25 de octubre tengamos un rol protagónico y activo en dichas elecciones porque el derecho a sufragio fue ganado con esfuerzo y debemos conmemorar la memoria de todas aquellas mujeres que lucharon para que pudiésemos alcanzarlo, entonces debemos comprometernos para ser escuchadas ya que somos más  del 50% de la ciudadanía, y no debemos quedarnos fuera de este proceso electoral, por ello les pido que extiendan sus redes para lograr una corresponsabilidad en el cuidado de nuestros hijos o hijas pequeños para que podamos ir a cumplir con esta meritoria misión, y recordemos que historia la creamos juntas. 

María José Palma Núñez, Seremi de la Mujer y la Equidad de Género de Arica y Parinacota.